martes, enero 21, 2003

Sobraban las palabras
Sinfonía para sábados sin planes previos

Estabas destilando esperas
metida en el delirio de casi las catorce,
con una sonrisa reflejada
en el cristal de un vaso consumido
por las ansias.

Estabas irradiando ganas,
sentadita en el aire,
casi como soñando.

Te miré un rato largo,
estudié tus facciones,
memoricé el sabor
de tus labios besando,
me metí en tu cabeza
para encontrarme vivo
entre tus pensamientos.

Te miré un rato largo,
después me acerqué
borracho de alegría,
y me vi reflejado
en el mar tempestuoso
de tus ojos brillantes.

Y no pude decirte
las cosas que pensaba,
es que al tenerte ahí
tan cerca de mis manos,
me dediqué a amarte,

sobraban las palabras.

No hay comentarios.: