miércoles, agosto 27, 2003

Factor climático
a Ella cuando estamos lejos

Quiero estar con vos
quiero aprisionar tu libertad interna
quiero condenar sábados de fiesta
para reclamar la parte que me corresponde de tu cuerpo
quiero convertir esta hambre ansiosa
en temblores y gemidos
en besos y caricias
quiero transformar la espera en un encuentro
que no sea tan fugaz
no tan discípulo del tiempo
atesorar las alas del deseo
adueñarme del vuelo de tu risa
y contemplar el sueño hecho incendio voraz
mientras la realidad arrasa
con las horas no vividas.

Quiero estar con vos
quiero edificar presentes que no acaben nunca
ya no quiero quedarme
metido en los recuerdos
quiero estar ahi
donde tu respiración palpita
donde tu corazón siente lo mismo
y tu voz se agranda hasta ser grito

Quiero abrigarte
que sientas mis manos sin tener que soltarte
quiero ahuyentar los miedos
y también los silencios
quiero tenerte entre mis brazos siempre

no importa si hace frío
calor
o está lloviendo
no importa si los techos se caen al unísono
si el mundo ya no gira
o chocan entre sí
los lejanos planetas
yo quiero protegerte
mimarte hasta que sientas el roce de mi alma
quiero enjugar tus lágrimas
con mis labios sedientos
quiero estar con vos
tan cerca que no exista
ni el aire entre nosotros
yo quiero estar con vos
ya no aguanto estar lejos.

domingo, agosto 24, 2003

Instantes antes de la sangre
a Ella cuando consiguió de mí lo que necesitaba

Dos o tres luces flotando en el invierno
la ciudad se queda atrás con sus motivos
y nuestro pequeño mundo sobre ruedas
amenaza devorar parte del tiempo

estás sentada a mi derecha
en un silencio atragantado de palabras
con el paisaje dibujado en los cristales
nada es mentira
no es posible mentir
el corazón acelerado
la pasión que viene desbordando pieles
con las ganas escritas
en una servilleta

estás tan cerca que tu respiración
es una isla
donde naufrago una y otra vez
con mis deseos
dos o tres luces flotando en el invierno
y un cartel
con unos numeros
que aviva las promesas

nada es mentira
repitieron los corazones al unísono
las pieles derretidas al intento
de borrar aquellos ecos silenciosos
de quedarnos con algo en el tintero

tomé de vos lo que quería
tomaste de mí lo que necesitabas
en esas horas de tumulto irreflexivo
en esos besos que rodaron por la almohada

todo es mirar
rozar
morder
acariciar
fundir y remachar
es canto de voces en espejos
es transmitirnos los sentidos
en una batahola infernal
donde el amor se confunde con el sexo

tomamos de nosotros
las dosis necesarias
para anudar despedidas en cansancios
en piernas temblorosas
en sudores totalmente necesarios

miles de luces flotando en el invierno
tu carita sonriente
mirándome alejarme
tu espalda vibrando de recuerdos
sin ecos vacíos ni reproches

a veces derrotamos al destino
y jugamos ganadores de antemano
retornamos a la espera satisfechos
de haber escrito nuestro mejor capítulo
instantes antes de que llegue la sangre.

miércoles, agosto 06, 2003

Y seguiré agregando

Lo infinitesimal
la huella de lo áspero
afilando los bordes acuosos e inexactos

crujidos arrancados a sabores y tactos
alfombras enrolladas en rincones gastados
monedas sin valor
canillas que gotean
caminos escondidos donde el sol nunca llega

agrego once marcas
a este código absurdo
de mareas sin alas
a esta pasión enferma
de gris
de infranqueables adioses sin mañana
sin saber
   sin oler
      sin tocar
sin apenas rozar un latido de sábanas

un brazo mal doblado
la lengua aprisionada
por tres dientes con hambre
los labios
su indigencia
de besos incubados

¿es así el dolor?
¿es así el extrañar?
¿es así la nostalgia?

cenizas en el cielo
lluvia que no se entiende
botellas descartables
pasan por mis angustias
como pasan las aguas debajo de mi barca
pasan por los anhelos
por las consignas viejas
por las reglas absurdas
por las horas abstractas
por la cosmogonía de calles sin señales

apoyado en la cuerda
que vibra enloquecida
casi desafinada
eludo la amenaza del miedo y de sus garras
y me quedo mirando
horizontes en fuga
me quedo reflejado en las manos del aire
me quedo semiahogado en tu última lágrima
me quedo retratado en tus ecografías
                         en tu temblor pausado
                         en tus furias de pájaro
                         en tus locas hogueras
                         en tus manos de óleo
                         en tu siembra de esperas

agregaré otra marca
y otra
y otra más
y seguiré agregando
aunque no haya lugar
aunque la piel se gaste
aunque la voz se quede colgando en los parlantes
aunque la noche caiga rodando por los bares
aunque la vida sangre su muerte sin puñales

domingo, agosto 03, 2003

Ella dice tantas cosas...

a veces llora,
más tarde rie sin razón
y después vuelve a llorar.

Tal vez sea yo el que no entiende.

Ella viene a buscarme
y yo tiemblo ante la inevitable
tormenta de risas y lágrimas.

La noche no piensa,
simplemente transcurre.

Yo quiero transcurrir,
pero no soy tan efí­mero y permanezco.

A veces me pego tan fuerte a los sucesos
que paso a formar parte
de lo que no pretendo.